En los pasados posts hemos visto que el estrés y desafíos de la vida pueden bloquear nuestros mecanismos de recuperación psicofisiológicos. Si estamos agotados, nuestras capacidades para afrontar situaciones adversas, tomar decisiones apropiadas y experimentar bienestar, se ven afectadas. Ahora bien, también hay buenas noticias. Disponemos de métodos para reajustar nuestros mecanismos cerebrales y psicofisiológicos que neutralizan con éxito el estrés y traumas vitales y que, además, estimulan adecuadamente áreas del cerebro asociadas con el bienestar, el descanso y la creatividad. Gran parte de estos métodos se originan en la meditación tradicional enraizada en la religión y se han desarrollado hundiendo nuevas raíces en la ciencia moderna. En el Instituto de Psicoterapia de Madrid (www.psicoter.es), hemos desarrollado un sistema integral de meditación terapéutica que, comenzando desde la focalización atencional corporal propioceptiva, se ha ido extendiendo a otros elementos de la vida corporal y mental. El método de meditación terapéutica consiste en los siguientes pasos:
1) Desarrollo de la actitud mental
Constituye el primer paso de la meditación terapéutica y es el aprendizaje de la actitud de aceptación y no interferencia con los procesos mentales surgidos en la meditación.
2) Meditación estática a través del cuerpo
La actitud mental se desarrolla en paralelo con la meditación estática en el cuerpo, a partir de la focalización atencional en sensaciones propioceptivas y funciones corporales. Es el primer paso en el contacto con uno mismo y con los mecanismos de recuperación y neutralización cerebral.
3) Meditación en movimiento
A través de la meditación en el movimiento, conocemos y desarrollamos el punto de tensión mínima; es decir, la tensión mínima neuromuscular que necesitamos para contrarrestar la fuerza gravitatoria. De esta forma, el gasto energético es el óptimo y la tensión somatizada en el cuerpo se distribuye y fluye a través del movimiento. Este método permite desbloquear tensiones somatizadas que interfieren mental y corporalmente.
4) Meditación en las emociones
En cualquiera de los pasos anteriores, las emociones surgen y requieren de un método para su regulación adecuada. La meditación en las emociones permite su neutralización exitosa, extrayendo la información útil de las mismas en un soporte y actitud mental adecuados. De esta forma, las emociones se separan de su poder disruptivo y generan un desarrollo personal proactivo.
Aunque hablaremos más en profundidad de estos métodos en otros posts, si estás interesado en su práctica regular y beneficios, escríbeme y con gusto te informaré